Se recurre a los siguientes recursos:
- La atención sanitaria necesita nuevos tiempos (eleconomista.es) agosto de 2023
- Las competencias sanitarias transferidas a las CC. AA. : entre los avances y los retrocesos (El Global) de marzo de 2022
- Reforma del sistema de financiación autonómica.: Ministerio de Hacienda y Función Pública de 2017
Para empezar, constatar un hecho evidente… La salud afecta a toda la población independientemente de la edad y de la situación social, y además hoy, durante más tiempo; y eso porque las expectativas de vida han aumentado más de veinte años respecto a principios del siglo pasado.
Ahora continuamos con otro hecho evidente…, y es que tras años en espera de una reforma de la financiación autonómica, aún quedan por solucionar los serios desajustes que sufre el Sistema Nacional de Salud (en adelante SNS)… Y dar con la solución es de suma importancia, porque la financiación es el eslabón más débil de nuestro sistema sanitario, más aún tras la pandemia de la COVID 19.
En concreto, estamos sometidos a retos y a escenarios de oportunidades con los que debemos de lidiar para lograr la máxima equidad y calidad asistencial para todos, además de hacerla sostenible en el tiempo. Y las soluciones para lograr la tan ansiada sostenibilidad van vas allá de los parches de los fondos europeos y de apelar a una supuesta eficiencia que, quizás, sólo podría estar dando satisfacción a criterios económicos… Hoy se hace necesario el consenso político e institucional que defiendan la gestión descentralizada y económicamente sostenible… Para ello hay que abrir las puertas a oportunidades que permitan aumentar la fortaleza y mejorar el futuro de nuestro sistema sanitario, y ello, por ejemplo, en cuestiones y retos tan de actualidad como:
- La evaluación del rendimiento del sistema sanitario.
- El fomento de la calidad asistencial y la seguridad de los pacientes.
- La mejora del acceso a la asistencia sanitaria,
- El establecimiento de un nuevo modelo de financiación en el que se tengan en cuenta los principios de suficiencia, calidad asistencial y eficiencia en la gestión.
- Una mayor transparencia en la contratación pública.
- La regulación de la coordinación sociosanitaria.
- La potenciación de la política de recursos humanos, su estabilidad, formación y motivación.
- El apoyo decidido a la investigación biomédica y la innovación.
- El establecimiento de un nuevo marco regulatorio para la colaboración público-privada.
- La aprobación de medidas de apoyo para la participación, la formación e información de los pacientes y sus asociaciones.
- La mejora de los sistemas de información poniendo al paciente en el centro y haciendo interoperables, no sólo los sistema sociales y sanitarios, sino también los centros hospitalarios y de atención primaria dentro del mismo servicio regional. Y por supuesto, sin olvidarnos del SNS, pendiente de una única historia clínica digital (incluso europea) y del acceso a una receta electrónica en cualquier rincón del país.
Pero no sólo nos enfrentamos a estas cuestiones. Por su parte, la evolución social y demográfica nos plantea nuevos retos y algunas tendencias ante las que ya es necesario actuar. Por ejemplo:
- Nos enfrentamos al envejecimiento y al incremento de las enfermedades crónicas; todo ello de la mano, afortunadamente, de los avances en el diagnóstico y en el tratamiento de las enfermedades.
- Del lado laboral nos enfrentamos a que en el sector de la salud hay previsto un déficit de 18 millones de profesionales en todo el mundo para el 2030 y esto requiere un cambio urgente de modelo hacia la virtualización, la automatización y la inteligencia artificial, de manera que pase a ser nuestra aliada.
La transformación digital se configura, pues, como un aspecto clave en el cambio.
- Del lado de los derechos sociales, nos enfrentamos a que habrá menos trabajadores que paguen impuestos para financiar programas de derechos tales como las pensiones o la atención médica. El Estado social, pues, necesariamente se tendrá que reinventar.
- Además, nos enfrentamos al nuevo problema de Salud Pública que supone la soledad no deseada de entre el 30% y el 50% de los mayores de 65 años. En consecuencia
, la soledad necesariamente ha de estar presente en todas las políticas porque los ciudadanos la van a vivir más, y más penosamente, y sólo con la (con)vivencia social se construye sociedad sin dejar a nadie atrás.
- Añadir una tendencia consolidada que cada vez vivimos más de cerca: Nuestro entorno se deteriora. Por eso hemos de tener en cuenta la sostenibilidad económica, social y ambiental
Este contexto el cambio climático supone un DOBLE desafío para la salud:
UNO, por la exposición al calor ambiental, lo que pone en peligro la salud humana y sobrecarga los sistemas sanitarios por el agravamiento de las enfermedades cardíacas, respiratorias, infecciosas y metabólicas (diabetes), lo que impacta principalmente en los mayores.
DOS, porque la atención médica contribuye a las anomalías climáticas, estimándose en un 5-6 % las emisiones globales de gases de efecto invernadero (edificios intensivos en energía, materiales de un solo uso, movilidad de trabajadores y pacientes, suministros de medicamentos, dispositivos, alimentos, etc.)… Hay que transitar hacia la sostenibilidad en la atención sanitaria con tecnologías, sistemas y pautas de consumo neutros para el clima. Actualmente el 40% es ineficiente. Más dinero para sanidad, SI, pero para hacer las cosas de manera más eficiente.
Con estos breves apuntes esperamos haber puesto un poco más de luz en los retos que se nos presentan, también en las oportunidades que se abren para impulsar el cambio.
1 comentario en “El sistema sanitario (VI) Retos y Oportunidades”
Yo creo que las amenazas son muy importantes porque los cambios que se nos vienen encima son grandes. A mi juicio los más importantes son dos:
1. el CAMBIO DEMOGRAFICO… La población envejece y, lógicamente, es más vulnerable y costosa su salud. Por tanto, el sistema sanitario público tenderá a saturarse -entre otras cosas porque la sanidad privada no les va a atender-… Además, como la población en edad laboral tiende a disminuir, las estructuras profesionales también se resentirán.. De hecho, ya he visto noticias que pronostican una falta de médicos muy importante porque muchos se jubilan en los próximos años (y no me cabe duda que la empresa privada sanitaria va a poner mucho dinero sobre la mesa para quedarse con los profesionales en detrimento de la pública).
2. CAMBIOS EN SALUD PUBLICA Y EL DETERIORO DEL ENTORNO.. Ya hemos tenido un anticipo con el coronavirus. Pero los cambios en nuestro entorno medioambiental y natural sin duda agravarán la salud global -al menos hasta que las nuevas generaciones se adapten al nuevo medio- y mucho más en un mundo donde las personas viajan a todas partes globalizando con ello las enfermedades.
Entonces, mi pregunta final ante los malos augurios es : ¿No es necesario cambiar ya el modelo social sanitario? Supongo que este es el GRAN RETO que puede abrir puertas a la OPORTUNIDAD (de cambio).
Gracias por ofrecernos temas para pensar.